Más de un millón de personas y decenas de hermandades participan en esta Romería que tiene como fin del camino el santuario de la Virgen del Rocío, en las proximidades de esa localidad.
La fiesta viene celebrándose desde el siglo XVII aunque la leyenda dice que la imagen de la Virgen estuvo oculta durante la ocupación musulmana hasta que fue encontrada por un cazador de Villamanrique de la Condesa entre espinas en el siglo XV y de este pueblo procede la hermandad más antigua.
Consiste en una romería hasta el santuario de la Blanca Paloma en Almonte (Huelva) por parte de hermandades procedentes de toda Andalucía occidental. Las diferentes hermandades rocieras salen en distintas fechas para coincidir en la aldea del Rocío al mediodía del sábado en vísperas de Pentecostés. Lo más típico es hacer el recorrido a caballo, en carreta o a pie a través de las marismas durmiendo en pleno campo. Al llegar a Almonte se acampa en espera de las demás Hermandades y el sábado desfilan para presentarse con el simpecado, la carreta con el estandarte y la reproducción de la Virgen. La noche del domingo nadie duerme en espera de poder entrar al templo para pasear a la Virgen, el salto es el momento de mayor fervor cuando los almonteños invaden la ermita, saltan las vallas y pasean a la Virgen por su aldea.